Parece mentira que después de unas vacaciones de relax y bienestar podamos volver a la rutina y sufrir de esto ¿verdad? Pues es un síndrome que realmente existe (post holiday depression) y para evitarlo hemos pensado algunas cosas que podríamos hacer ☺.
Poder disfrutar unas semanas de vacaciones pagadas es un derecho que hemos conseguido en el primer mundo, (aunque parece ser que los norteamericanos todavía no lo han logrado –la mayoría de ellos solo toman una o dos semanas al año, como mucho ¡qué pena!-).
Pero ¿cómo aprovechar las vacaciones y luego volver con ganas al trabajo y a la rutina? La clave es saber desconectar de verdad durante las vacaciones y así regresar más descansado. Intenta no trabajar hasta el último momento antes de coger las vacaciones. Si puedes, organízate el trabajo para dejar todo “atado” al máximo y así podrás irte con más calma y disfrutar del tiempo libre sin tener que preocuparte de problemas no resueltos. Claro que esto es más fácil decirlo que hacerlo (easier said than done!), pero hay que intentarlo.
Cada uno disfruta de sus vacaciones como quiere: algunos con solo dormir mucho, tumbarse en la playa y comer bien están satisfechos; otros prefieren viajar y conocer sitios; todo vale para desconectar. (Anything goes!) La idea es cambiar de aires y de rutina y estos pequeños paréntesis en nuestras vidas sirven poder poner las cosas en su sitio en nuestras mentes y poder preguntarnos si realmente estamos contentos con la vida que llevamos. A veces solo es cuestión de hacer unos cambios pequeños; pero si llegas a odiar la idea de volver a tu rutina y tu trabajo, quizá sea hora de que vayas pensando en hacer cambios más radicales.
Casi nadie trabaja por amor al arte (for the love of it), trabajamos para poder vivir más o menos bien pero esperamos poder disfrutar un poco con nuestro trabajo también. Al fin y al cabo, pasamos un tercio de nuestras vidas en el trabajo y si estamos infelices el 33% de la vida, mal asunto ¿verdad?
Volver de las vacaciones no le agrada a nadie, pero una forma de suavizarlo podría ser tratar de encontrar una motivación para seguir, por ejemplo, ir planeando ya la próxima escapada dentro de unos meses o plantearte hacer algo nuevo y distinto este año. Para mucha gente el año nuevo no empieza el 1 de enero sino el 1 de setiembre, después de las vacaciones y con el comienzo de un nuevo curso. Es realmente cuando la gente empieza a hacer nuevos propósitos de vida, como por ejemplo decidir que por fin este va a ser tu año para aprender bien inglés y, de una vez por todas, salir del búnker del nivel básico/intermedio.
En la vida hay que plantearse retos, no debemos estancarnos en nuestra comfort zone de siempre. Septiembre es el mes en que más gente se apunta a los gimnasios y las academias de inglés, pero el problema es cómo mantener la motivación para seguir apuntado más allá del primer mes ¿verdad? ¡Ja ja!
Y en cuanto al inglés, la clave es elegir una escuela o un método que te sirva de verdad y donde veas que avanzas y disfrutas con el aprendizaje. Muchas academias te prometen la luna (they promise you the moon and the stars) con su marketing llamativo pero al fin y al cabo, lo que vale es si funciona y estás a gusto con ello. En Cambridge House English Schools lo entendemos e intentamos darte lo que necesitas. Falsas promesas de nuevos métodos infalibles, como aprender sin necesidad de estudiar, no van con nosotros. Sabemos que, como todo en esta vida, recoges lo que siembras (you reap what you sow) y nada viene sin esfuerzo (ni perder peso, ni ponerte en forma, ni aprender inglés te va a llegar sin ello).
Pretendemos que nuestra forma de dar clase te siga motivando pasado el primer mes y que estés a gusto con tu progreso y contento con el método. En Cambridge House practicamos todas las habilidades que te hacen falta: reading, listening, vocabulary y grammar y siempre usando únicamente el inglés en las clases y intentando dar variedad de actividades y todo en el mejor ambiente posible. ☺
Puedes aprender a defenderte en inglés para tus próximos viajes. Si has estado en el extranjero este verano, te habrás dado cuenta de que el inglés sigue siendo la lingua franca del mundo y más vale saber algo para no tener problemas en tus próximas vacaciones.
Así que, volver de vacaciones no tiene por qué ser un drama, saca lo positivo y vuelve con nuevas ideas y propósitos: ¡cambia tu vida a mejor!